La primera regla a tener en cuenta es no matarte de hambre. La mayoría de las personas que intentan perder peso han probado este método y simplemente no funciona. Si no funcionó antes, ¿por qué lo haría de nuevo? Se ha demostrado una y otra vez que aquellas personas que utilizan el método de la inanición para intentar perder peso solo terminan subiendo de peso después de cada sesión. Esto no es culpa de ellos. Cuando una persona se muere de hambre, su cuerpo no sabe cuándo volverá a recibir la comida que necesita. Aquí es donde entra en juego nuestra composición ancestral y nuestros cuerpos hacen todo lo posible para conservar la grasa. Este mecanismo evolutivo a menudo se denomina “mecanismo de protección contra la inanición” o “modo de inanición”. Para las mujeres, este mecanismo de fabricación evolutiva se activa cuando el cuerpo no satisface sus demandas nutricionales (alrededor de menos de 1200 calorías para las mujeres).
El modo de inanición ralentiza la pérdida de grasa corporal y desencadena la pérdida de masa muscular. Esto produce un efecto desfavorable sobre la composición corporal, dando como resultado un tipo de cuerpo conocido como grasa flaca. Esto simplemente significa que terminará con un porcentaje de grasa corporal más alto, aunque pese menos.
Datos sobre morirse de hambre:
1. Estrés
Cuando te mueres de hambre, estás estresando tu cuerpo. El estrés, a su vez, aumenta el cortisol, lo que aumenta la grasa abdominal. Es lógico que su cuerpo no sepa que está reteniendo calorías a propósito y que hay varios restaurantes y emporios de comida rápida a la vuelta de la esquina.
2. Ingesta calórica
Su cuerpo simplemente cree que reduce su ingesta de calorías tan severamente que debe haber una hambruna; y dado que no sabe cuándo estarán disponibles los suministros de alimentos, ralentizará todos los procesos sin importancia para ahorrar energía, como ralentizar el metabolismo. Para el cuerpo, ahorrar energía significa que quema menos calorías.
3. La importancia de los nutrientes
Cuando priva a su cuerpo de nutrientes importantes, por lo que no cumple con las demandas calóricas y nutricionales de su cuerpo. Esto no solo aumentará su riesgo de problemas médicos, sino que también hará que la pérdida de peso sea mucho más difícil.
4. Comprenda su meseta de pérdida de peso
Al final, llegará a una meseta de pérdida de peso y, por lo tanto, abandonará su dieta muy baja en calorías y recuperará todo el peso. ¿Por qué pasó esto? Una vez que comienza a comer normalmente, recupera su peso, y algo más, porque la tasa metabólica de su cuerpo no ha vuelto a la normalidad. Recuerde, su tasa metabólica se ralentiza con su privación calórica. Dado que su tasa metabólica sigue siendo lenta, esto significa que durante su período posterior a la dieta necesitará menos calorías que antes.
5. Aumente su tasa metabólica
Para perder peso, es importante hacer todo lo posible para proteger su tasa metabólica y, si es posible, aumentarla. Para hacer esto, debes engañar al mecanismo de protección contra el hambre de tu cuerpo, mediante una manipulación cuidadosa de tu ingesta diaria de calorías, usar ejercicio cardiovascular para aumentar el déficit calórico e implementar entrenamiento de resistencia para evitar la pérdida de masa muscular.
Todo se reduce al hecho de que el hombre o la mujer promedio debe reducir su ingesta de calorías en al menos 500 por día para perder 1 libra por semana. Como en todo lo demás, hay variables que hay que tener en cuenta. Cada persona y su cuerpo son diferentes.
Si está cuidando su ingesta de calorías para reducir su peso, también debe tener en cuenta los nutrientes que ingiere. Un método simple a tener en cuenta es comer una colorida variedad de vegetales. Los vegetales rojos, verdes y amarillos brindan una rica variedad de nutrientes que son vitales para que su cuerpo mantenga su salud.
Los siguientes son algunos consejos para ayudarlo a perder peso
1. Bebe agua y olvídate del resto
Si su objetivo es perder peso, aparte del té y el café, elimine todas las bebidas. Las bebidas son extremadamente ricas en azúcar y están llenas de calorías, pero no te llenan. Esto incluye jugos de frutas, si bien son altos en nutrientes, también son altos en calorías. Debes comer tu fruta para incluir la fibra. Las verduras son una excepción. Puede exprimir sus verduras sin aumentar la ingesta de azúcar.
2. Elija queso de cabra en lugar de queso de leche de vaca
Las calorías del queso varían mucho. El queso elaborado con leche de cabra contiene aproximadamente un 40% menos de calorías que el queso normal.
3. Consuma grasas monoinsaturadas para bajar de peso
Consuma alimentos ricos en ácidos grasos monoinsaturados (M UFA), como nueces, aceite de oliva y aguacates. No solo ayudan a perder peso, sino que también recortan la grasa abdominal.
4. Agregue cafeína a su dieta
Beba café o, mejor aún, té verde rico en antioxidantes. 2 tazas de café al día impulsarán su metabolismo, y existe evidencia de que la ingesta diaria de café protege contra la enfermedad de Alzheimer. El consumo de 5 tazas de té verde al día aumenta el metabolismo en un 20%, lo que te ayuda a quemar grasa y perder peso.
5. Agregue mostaza para bajar de peso
Los científicos han demostrado que con solo agregar una cucharada de mostaza a su comida puede reducir la grasa del vientre en un 20%.
6. Comprar para bajar de peso
Cuando las compras opta por mantener alimentos naturales con ingredientes, los encontrará en la naturaleza. Estás volviendo a lo básico.
7. Consuma más proteínas
La proteína es muy abundante pero relativamente baja en calorías. Comer mucha proteína magra significa que puede reducir las calorías y perder peso sin sentir hambre. Sus mejores opciones para cortes de carne magras en proteínas, pescado como salmón, etc., y huevos.
Conclusión
Una pauta importante para seleccionar opciones de alimentos es si los ingredientes que figuran en la etiqueta son algo que no puede pronunciar o entender, no coma. Despídase de los alimentos preparados, los alimentos procesados y la comida rápida para ver cómo se encoge la cintura.